Suzhou - Hangzhou día 3

De nuevo salimos temprano para aprovechar el día. Fuimos de nuevo al 网师园, y ahora si la entrada salía Y20, muy lindo. Lo que tienen los jardines de Suzhou y en general es que uno disfruta de la naturaleza y se relaja. Además nuestro viaje lo hicimos en el inicio de la primavera, y siempre luego de un largo invierno, se agradece un poco de sol y flores...

Vista del Jardín del Maestro de las Redes

De ahí a las Pagodas Gemelas 双塔院 Y4. No era nada del otro mundo, pero estaba vacío y eso nos permitió descansar un poco y disfrutar del sol… Nos quedamos conversando como una hora, hasta que nos dimos cuenta que ¡nos habíamos quedado sin tiempo! Partimos al hostel a buscar nuestras cosas, tomar el autobús 1 para la estación del metro.

Tomamos un tren rápido que nos llevó a Hangzhou por Y118. Y llegamos a las 3.

Posando junto a las Pagodas Gemelas

Saliendo de la estación a mano izquierda se toma el bus K7 que nos dejos al inicio de la calle 中山中路, calle peatonal muy turística. Nuestro hostel estaba al final de la calle hacia el sur, más o menos 6 cuadras caminando. Estábamos cansadísimo y el pobre Alain con la mochila a cuestas. Llegamos, nos registramos, todo perfecto – esta vez había dormitorio mixto – Ya descansados, salimos a dar una vuelta por la ciudad. Primera impresión: ¡había demasiada gente! Las calles peatonales estaban repletas de personas (recuerden que hicimos nuestro viaje durante las fiestas chinas)

Visitamos la calle 中山中路: Zhongshan Zhonglu. Y caminamos hasta el norte… nos alejamos bastante, caminando y caminando hasta que llegamos al Lago Oeste.

Seré sincera, no me gustó mucho y eso que alcanzamos a ver el espectáculo de luces. No se si era porque había una gran cantidad de gente, esos días se celebraba el día de los Muertos y por lo tanto, todo el mundo aprovechó para vacacionar, o simplemente no me gustan tanto las cosas naturales y prefiero los museos. En fin, miramos desde lejos el espectáculo de agua y luces, y nos dedicamos a buscar un restaurante… todo lleno. Menos mal que por detrás de la calle había una pizzería que por 150 yuanes por dos personas nos ofrecieron un mega menú de 5 platos…

Y bueno, después de comer, y muy muy cansados, volvimos al hostel a descansar.

Suzhou parte II

Día 2

Nos levantamos totalmente repuestos, y descubrimos que en el hostel había una señora que hacia desayuno. Por ¥22 había ¡café, tostadas, frutas, bacon y huevo! Lo amamos y olvidé las cosas malas del hostel. Comimos felices y salimos a caminar.

Caminamos hacia el norte y buscamos la calle Pinjiang 平江路, calle tradicional con los canales. La verdad es que el casco antiguo no es muy grande y se puede caminar, bueno si no les gusta mucho o andan con poco tiempo, las distancias no son tan grandes y pueden andar en taxi que parte desde los ¥11. Antes nos metimos por un mercado de plantas y pájaros muy lindo, y nos sacamos las típicas fotos con los canales. Luego nos fuimos al famoso Jardín del Administrador Humilde, entrada ¥50 en temporada baja, si mal no recuerdo ¥70 en temporada alta. Había mucha mucha gente, creo que debimos haberlo visitado más temprano, pero era muy lindo, es tan grande el jardín que no se notaba que había mucha gente. También en la entrada regalaban el mapa del jardín y de la ciudad. Súper organizado. Al costado esta el museo de Suzhou, que es gratis, y se visita rápido, tampoco encontramos muy emocionante el museo. El jardín vale la pena, además es parte del patrimonio de la Humanidad. Además que estos jardines tienen un ambiente de tranquilidad que hace olvidarse del caos, la verdad es que cumplen perfectamente su función sobre la búsqueda de la armonía.

Desde la misma zona pueden tomar los autobuses 游1 o 游2 que los pueden llevar a diferentes destinos turísticos. Nosotros tomamos un autobús hasta la estación del tren, almorzamos y fuimos a la Colina del Tigre 虎丘, entrada ¥40. Como andaba un poco adolorida de la rodilla, y la gracia es subir hasta la pagoda milenaria, tomamos un coche 旅游车, que por ¥20 por persona, nos dio un lindo paseo por el parque y nos dejó en la cima. También pueden pasear en un carruaje a caballo, pero ese no sube. 马车¥10

Finalmente volvimos al hostel cansadísimos de tanto caminar. Descansamos un poco y salimos a visitar el Jardín del Maestro de las Redes 网师园 pues había leído que tenia entrada nocturna... Cuando llegamos nos dijeron: ¡¡¥100 yuanes por persona!! Y cuando preguntamos por precio estudiante, claro que no había. Nos dimos medía vuelta y nos fuimos. Claro, estaban vestidos de la época y es un plus, pero nosotros no íbamos a pagar ¥100. Por lo menos averiguamos donde estaba. Y seguimos caminando.

En esa misma calle 十金路 están los bares y restaurantes más extranjeros. Luego de buscar un poco, comimos en un restaurante coreano bastante bueno, pero hay para todos los gustos. Y obvio, seguimos caminando hasta que llegamos de vuelta al hostel…. Estábamos rendidos. 

Llegando a la Calle Pingjiang 

Calle Pingjiang

Jardín del Administrador Humilde

Jardín del administrador Humilde. Ya habían llegado algunos tour para ese entonces

Museo de Suzhou desde dentro

Jardín Liuyuan 

Colina del Tigre. 

Desayuno!!!

Por Andrea Mella

Viaje a Suzhou. Parte 1

Les cuento que ya hemos vuelto a Beijing, fueron 5 días y 4 noches viajando sin parar con Alain. Les contare día por día para hacerlo mas ordenado.

Día 1.

Este día solo hicimos Beijing - Suzhou. No encontramos más pasajes de tren así que salimos a las 17.30 y llegamos a las 22.30 a la estación Suzhou norte ¥525 por persona. Desde el año pasado, han aumentado los trenes rápidos, que hacen tramos entre Beijing y Shanghai de 5 horas. Casi lo mismo que toma ir al aeropuerto, estar 1 hora antes, el vuelo y llegar a la ciudad. Hay asientos de 1ra y 2da clase que van entre 1000 yuanes los primeros y 500 los segundos.  Estos tickets, como los precios son un poco más elevados que los trenes cama, se agotan después - pero igual se agotan - así que es un poco más fácil conseguirlos. Generalmente comienzan con la letra G y luego el numero del tren, por ejemplo G40. Nosotros tomamos el tren rápido.

Como era muy tarde, no había autobús, así que tomamos un taxi negro, que por 60 yuanes nos llevo al hostel. Era una minivan así que fuimos a dejar a otras personas, lo que sirvió de city tour, para hacernos una idea de la ciudad: muy grande y el trafico se veía mal jajaja.

Llegamos sin problemas, pero llegando al hostel, nos encontramos con el primero: yo había reservado dormitorio mixto, pero ¡no! No existía dormitorio mixto y con Alain quedamos en pisos diferentes, casi eran las 12 de la noche cuando empezamos a sacar las cosas de la mochila - que Alain llevaba - con mis cosas, y escalera arriba con toalla, shampoo, jabón, ropa y todo lo que una mujer de viaje carga.

Quisimos salir a caminar por la ciudad de noche, pero el hostel literalmente cerraba a las ¡12 de la noche! Ahí fue cuando nos dimos cuenta de que el hostel era demasiado 'oriental'. Éramos unos de los pocos occidentales ahí, y no había ambiente: todos en silencio jugaban videojuegos o veían películas. En fin, nos comimos una lata de atún y a la cama. Lo bueno es que todo estaba limpio y la cama estaba muy cómoda, así que caímos rendidos....

Por Andrea Mella

Diabetes en China

Muchos de ustedes me conocen a través de este blog. Trato de ayudar a quienes quieren aventurarse a venir a China. Pero hoy quiero hablarles sobre una experiencia muy personal, relativamente reciente y espero que pueda ayudar a alguno de ustedes.

Les cuento que hace más o menos 6 meses volví a Chile luego de estar 2 años sin volver. Como corresponde partí a hacerme los exámenes médicos y ¡sorpresa! Tenía diabetes tipo 2. Para mi fue un balde de agua fría, mejor dicho, congeladísima. Tenia exactamente un mes para volver a China y tenia el azúcar por las nubes… colapsé en muchos sentidos, luego de algunos días de colapso, de negación, y de arruinarme mis planes de comer hasta reventar de comida rica chilena, comencé mi plan de acción.

Luego de 6 meses acá en China, sigo estando colapsada pero más asumida – quizás tenga que ver con las etapas del dolor jajaja recién vengo llegando a la aceptación – porque ser diabética en tu propio país es difícil, imagínense en un país tan diferente como China. Primero porque yo no tenía ni la más remota idea de los carbohidratos ni nada por el estilo y de golpe se vinieron palabras como carbohidratos, metformina, glicemia y otros términos que aun no proceso muy bien. Me ordené lo más rápido posible, me compré mi tomador de glucosa y en un mes y medio había bajado mi azúcar de 300 en ayunas a 90… y así me vine a trabajar a China.

Cuando llegué me tocó la convivencia con Alain, mi esposo, que como buen cubano ama el arroz con frijoles a toda hora, y yo peleando por medir las porciones. Nos cambiamos a una habitación con cocina, y comencé mi "dieta".

Mi ensalada Starbucks salvadora

Puedo decir orgullosamente que me he mantenido, a pesar del duro invierno y las cero ganas de salir a hacer cualquier tipo de ejercicio, a pesar de que la comida china de sana no tiene nada – quienes hayan venido se acordarán de mi –, de que todo tiene algo de "azúcar" y que la palabra diabetes es desconocida, tanto que fui al hospital de la diabetes en Beijing y no me entendieron nada de lo que quise decir jajajaja, de la inexistencia de ciertos productos en Beijing, incluso en los supermercados internacionales… a pesar de todo eso he mantenido mis horarios, he aprovechado las distancias para caminar más, de que mis restaurantes favoritos tienen ensaladas y con eso he podido "salir mas" – perfecta justificación – y de que desde que volví de Chile, Alain también se ha sumado a mi cruzada y ha bajado sus kilos, y ¡casi que no come arroz el pobre!

Bueno, quería comentarles esta experiencia, y bueno, si alguien de ustedes es diabético y quiere venir para acá, puedo decirles que es difícil, ¡pero no imposible!


Por Andrea Mella